«quizás el hada te dará tus rosas; mi corazón, tus lirios.»
Antonio Machado
Lily (Pandora) era una pobre vagabunda que deambulaba entre la indiferencia de los transeuntes, con su inocencia propia de un cachorro, Lily corría detrás de la gente que salía a pasear con sus mascotas, maullándoles e intentando llamar su atención, sin éxito.
Cariñosa hasta la médula, esta pobre gatita sufrió la indiferencia durante meses, hasta que una persona por fin la miró, la vio y la rescató.
Lily no es más que un bebé, con apenas seis meses de vida, lo único que quiere es jugar, saltar, caricias y quedarse dormida en tu regazo. No discrimina a nadie, ella se va con cualquier personita que le de atención y muchos juegos.
No te preocupes, no todo es juego, de vez en cuando tiene momentos de paz y tranquilidad, y tampoco es muy quisquillosa, ya que casi cualquier compañero… ¡Es buen compañero!
Pero que no te engañen esas dulces fotos… ¡vas a necesitar muchos rascadores y cuerdas!
Felizmente adoptada — Lily en su nueva casa
Experiencia del adoptante
Estábamos pensando en adoptar a una gatita ya que tenemos un macho en casa, es un tipo serio y a nosotros no nos hacía mucho caso. Así que queríamos una compañia para él. Pero hay tantos gatitos que necesitan familia, cómo se puede elegir entre todos?? Pero un día vi a esta muchachita hermosa y pensé: cómo es posíble que lleve tanto tiempo en la acogida y nadie la quiere?! Es perfecta! Fue el amor a primera vista. Entró en nuestra familia e iluminó todo con su energía, su ternura y su elegancia. Es toda hecha una dama! Siempre anda ocupada como si tuviera muchas cosas que hacer, y no deja de fastidiar al veterano de la casa, pero a él le encanta su atención. Esta gatita es un amor, y ahora somos una familia aún más completa.
«Hasta que no hayas amado a un animal, una parte de tu alma permanecerá dormida»
Anónimo
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