Mila

«Del centro de sus ojos se desprende; un fulgor diafanísimo y brillante»

Carolina Coronado


Mila es, de esas gatitas que piensas: no puede ser vedad. Esta pequeña era una gatita callejera totalmente y, pese a eso, pese a haber sufrido la calle, pese a haber pasado frío, hambre y dolor, nunca fue vengativa ni malhumorada. Es una gatita que no parece callejera de lo buena que es. Mila pertenece al sistema CES (Captura Esteriliza Suelta) del municipio de Bigastro y, una noche, cayó en una de nuestras jaulas.

Mila el día que cayó en la jaula trampa

Normalmente a las gatitas callejeras se las tiene un tiempo para que se recuperen de la castración y se libera de nuevo, sin embargo, Mila era tan buena y cariñosa, que nos daba mucha pena tener que volver a echarla a la calle así que decidimos buscarle una buena familia.

Mila en su jaulón

Afortunadamente, una familia pronto vio lo increblemente única que era esta gatita y decidió incluirla en su núcleo familiar y ahora vive con su hermanito peludo y sus humanos. Se acabó el pasar frío, el pasar hambre y el sufrir enfermedades en la calle y en soledad, ahora Mila tiene, por fin, una familia: su familia.

Mila junto con su cuidadora, haciendo el cambio para irse a casita
Mila con su hermanito

Experiencia vivida

Antes
Durante

Después


[Experiencia adoptante]


No te esperaba y, sin embargo, cambiaste mi vida.

¿Te gustaría dar una oportunidad así a alguno de nuestros peludos? Nuestros gatitos en adopción y perritos en adopción esperan a una familia.

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