El 22 de septiembre recibimos un aviso de un gatito que se encontraba en malas condiciones, pero no imaginábamos que se encontraba en tan malas condiciones.
Para rescatarlo, hicieron falta unas seis personas. El gato no se podía coger de debajo del coche y tuvimos que cubrir los laterales con mantas y sábanas de modo que solo quedase una salida libre: la de la jaula trampa. Se cambió tres veces de coche entre intento e intento y, finalmente, pudimos capturarlo en unos de esos cambios.
Tom presentaba unas fracturas bastante graves: la mandíbula partida, una inflamación tremenda del cráneo, un ojo en muy mal estado, infección, desnutrición… Sin dudar, tuvo que ser ingresado en el veterinario.
Inmediatamente iniciamos una recaudación al ver que los gastos con este pobrecito se iban a disparar y, afortunadamente, muchas personas se solidarizaron con él y enseguida comenzaron a aportar dinero para costear su tratamiento: tratamiento de Tommy. Aunque también recibimos muchas donaciones en mano y mucha gente se unió al teaming con el objetivo de apoyarnos en esta lucha que se nos venía encima.
Increíblemente, Tommy comenzó a evolucionar favorablemente. Muy lento y con mucha cautela, pero comenzó a responder al tratamiento. La inflamación del ojo se redujo bastante en los pocos días y, aunque no comía por sí solo, ya estaba mucho más tranquilo. Su alimentación se realizaba a través de una sonda. En un principio, Tommy solo se iba a quedar ingresado unos pocos días, pero finalmente el ingreso se prolongó más de una semana. Una mujer muy amable que ingresó a su gatito con una enfermedad renal el mismo finde que Tom se tuvo que quedar, le compró un peluchito a Tommy para que le hiciera compañía durante su larga estancia cuando coco, su gatito, salió del veterinario.
Tommy poco a poco fue mejorando, aunque una de las veces se llegó a quitar la sonda y, poco a poco, los veterinarios comenzaron a darle de comer paté diluído en agua a través de una jeringa, a lo que Tom respondió muy bien.
A la semana del ingreso, nos dijeron que era posible sacarle del veterinario, aunque la casa de acogida tendría que ser muy responsable en su cuidado y alimentación debido a su estado tan delicado. Así que, como teníamos a la persona indicada, decidimos lanzarnos a la piscina y el 3 de octubre, después de 12 noches de ingreso, lo sacamos de allí. Su peso era muy inferior al que le correspondía, no llegaba ni a los dos kilos, pero eso no nos desanimaba con él.
Ahora mismo, Tom se encuentra en un lento y duro proceso de recuperación junto a Gloria, su mami en acogida. Juntos van a pelear mucho por salir adelante.
Seguiremos actualizando conforme vaya avanzando el estado de Tom, esperamos finalizar esta publicación con un: felizmente adoptado ❤. ¿Quieres ayudarnos con Tom?, una de las opciones es unirte a nuestro Teaming de modo que con solo un euro al mes, nos ayudarás a sacar adelante a Tom y a otros muchos casos como el suyo.
¡Gracias a todos por pelear por él!
Desafortunadamente Tommy no pudo aguantar, debido a la infección, los pulmores se colapsaron y tuvimos que dormirle… DEP pequeño. Publicación en facebook